Creatividad
Somos humanos, somos creativos
Maria Lavigna
Periodista
Durante mis épocas de estudiante me enseñaron a hacer las cosas de una determinada manera, y a saber todo el manual Kapelusz al dedillo para poder ser una profesional exitosa y triunfar en la vida. Y a mis cuarenta y tantos me dicen que tengo que desaprender todo lo que sé, porque lo único que servirá en breve es que sea creativa, osada, novedosa y que el talento no lineal es el que las máquinas y su inteligencia artificial, no podrán copiarnos, por lo que también tengo que pensar qué tipo de educación daré a mi hijo… hagamos un alto.
Nadie tiene certeza qué profesiones serán las necesarias en algunos años más y es muy probable que la mayoría de nuestros hijos trabajen en profesiones que hoy aun no existen. Sin embargo, hay algunas cuestiones que me enseñó la vida analógica, (ni digital ni artificial), que me parecen interesantes compartir en este espacio dedicado a la creatividad.
Ser creativo no es algo que tienen unos sí y otros no, ser creativo es una condición intrínseca del ser humano, está en nosotros, y tiene que ver con nuestra esencia, somos humanos y dominamos este mundo como tales por sobre otras especies, porque somos creativos.
Siento necesidad de expresarme en este sentido, porque la creación está en nuestro imaginario como algo exactamente opuesto, como un genio que nos excede. Incluso a este preconcepto creo haberlo encontrado impreso en el Diccionario de la Real Academia española, en el que dice que la “creatividad”
es la facultad o capacidad de crear o de creación. Y si busco “creación” en el mismo diccionario, encuentro “acción y efecto de instituir, establecer”, “o sacar Dios algo de la nada”. Considerarse creativo era y en cierto punto hasta es hoy, una pretensión. De hecho en mis épocas escolares, había un espacio para la creación que en realidad tenía más que ver con la recreación, y era en las horas de las actividades prácticas, plásticas y música. Pero en todo caso sólo con la técnica, saber pintar perfecto, lograr una perspectiva exacta, o interpretar una pieza de piano, no nos hace creativos.
¿Y yo no soy creativa entonces? Todos somos creativos, pero eso no significa que podemos hacer absolutamente todo, decididamente no puedo interpretar Mozart al piano, pero cuando siento Mozart y lo entiendo gracias a todo lo que aprendí en las clases de música, logro que vuelen las palabras y escribo. A contramano de la técnica, la creatividad me parece más cercana e la confianza en uno mismo y a saber sentir. La pasión, los gustos, lo que nos da placer investigar y pensar, es lo que nos vuelve creativos. No sé si soy creativa, algunas “soluciones audaces” me valieron algunos reconocimientos, y para llegar a eso, tuve que dejar el manual Kapelusz de lado para conocerme más, ahondar la mirada hacia mi interior y expandir esa mirada al exterior. Quizás entonces, tu desafío personal sea entender cómo todo tu ser espera que motives esa originalidad que te convierte en único.